La comunidad
Un perro se metióen el armarito de las escobas
y tosió bajo las mantas.
Los vecinos quisieron
poner fin a la herejía,
tomaron las hachas,
las biblias, las antorchas
y ocuparon el rellano.
Quisieron entrar,
ladrar, rasgar, morder,
hacer justicia,
vengar a los inocentes,
pero quién no tiene miedo
al rugir de una fregona,
a la purga frenética de una gamuza…
4 comentarios:
guau?
Las fregonas no son tan inofensivas como parecen.
Genial.
Miedo a la sinceridad.
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